Mantenimiento Residencial: Guía Básica

El mantenimiento residencial incluye todas las medidas que los propietarios y administradores residenciales deben tomar para que una estructura habitacional sea cómoda y segura.

El estado de un condominio influye directamente en la calidad de vida y el bienestar de quienes la habitan. Por eso, la gestión del mantenimiento en este campo es muy importante para cumplir con las expectativas de los residentes.

¿Qué es el Mantenimiento Residencial?

El mantenimiento en un conjunto residencial busca preservar un edificio usado como vivienda y sus alrededores, para proveer condiciones óptimas de hospitalidad.

Es importante decir que el mantenimiento residencial es valioso tanto para los propietarios de un inmueble como para quienes lo ocupan.

Por un lado, los dueños ahorran dinero a largo plazo invirtiendo en mantener una propiedad en condiciones favorables, y esto es bueno para los inquilinos, porque se sienten más a gusto en un lugar.

El mantenimiento en una residencia puede ser planificado y gestionado por el propietario o el administrador del condominio, pero esto no quiere decir que las tareas de mantenimiento sean hechas personalmente por los dueños y administradores.

De hecho, lo común es que se contraten servicios de mantenimiento residencial para el trabajo de campo, que suele incluir las siguientes actividades:

• Limpiar zonas comunes internas y externas (corredores, techos, canales de drenaje, etc.).
• Control de plagas.
• Jardinería y paisajismo.
• Separación y disposición de desechos.
• Reparaciones mecánicas, eléctricas y de suministro de agua (aires acondicionados, tuberías, calefacción, etc.).
• Chequeos de seguridad periódicos (inspecciones de rutinas para sistemas de alarmas de incendios y extintores, por ejemplo).

Diferencias entre el Mantenimiento Residencial y Comercial

El mantenimiento comercial se refiere a las reparaciones e inspecciones periódicas o correctivas en instalaciones comerciales, como tiendas y restaurantes.

No hay mucha diferencia entre el mantenimiento residencial y comercial, salvo por el alcance de las tareas preventivas.

Los comercios necesitan, por ejemplo, de acciones de mantenimiento más específicas, como:

• Servicios de limpieza de ventanas.
• Remoción de nieve.
• Mantenimiento y sellado de estacionamientos.
• Mantenimiento estacional de HVAC.
• Reparación de suelos.
• Cerrajería.
• Reparación de puertas y ventanas.
• Pulido de suelos.
• Limpieza de escaleras mecánicas.
• Saneamiento de servicios de alimentos.
• Eliminación de desechos médicos.
• Control de inventario.

Consejos para el Mantenimiento en un Conjunto Residencial

Un mantenimiento residencial de calidad empieza por una organización seria y profesional, donde se tomen en cuenta el estado actual de los activos y las causas comunes de avería.

Aquí hay cuatro consejos básicos que te ayudarán a planificar un mantenimiento residencial eficiente.

1. Considera el presupuesto disponible antes de tomar decisiones

Siempre tiene que haber un presupuesto de mantenimiento preestablecido para el cuidado y reparación de un conjunto residencial.

Este presupuesto se debe acomodar a los costos de mantenimiento, tarea que no siempre es fácil, sobre todo cuando hay reparaciones costosas por hacer.

Aquí gana mucha importancia el poder de negociación y el hábito de evaluar primero opciones distintas para, luego, elegir la más adecuada.

Además, lo que se recomienda es que calcules y hagas un presupuesto proactivo para el mantenimiento considerando gastos operativos anuales. Recuerda que debes pensar también en el ciclo de vida de los activos que hay en el lugar.

2. Procura usar componentes duraderos

Cuando reemplaces componentes o piezas, elige materiales duraderos, aunque sean más costosos.

Uno de los secretos para el buen mantenimiento residencial es disminuir las probabilidades de fallas a mediano y largo plazo producto de componentes mal instalaciones o de pésima calidad.

Un aire acondicionado que ha sido reparado usando piezas de segunda mano puede volver a presentar fallas muy pronto, y esto hace que el presupuesto no rinda como debería.

3. Automatiza tareas básicas de gestión

Para automatizar tareas de gestión de mantenimiento residencial, usa un Software de Mantenimiento.

Te sorprenderá cómo cambia tu vida dejando de hacer lo mismo una y otra vez, y permitiendo que la tecnología se encargue.

Si no sabes qué tareas pueden automatizarse con un software profesional, aquí hay un resumen:

• Órdenes de trabajo.
• Planificación de jornadas de mantenimiento.
• Alertas inteligentes para avisar de fallas técnicas.

4. Planifica auditorías periódicas

El último consejo para un mantenimiento residencial inmejorable es verificar cada cierto tiempo el estado general de la propiedad.

Cuando haces esto, puedes ahorrar dinero en tareas de mantenimiento correctivo, ya que los problemas se detectan a tiempo.

Cada vez que realices auditorías periódicas, asegúrate de revisar:

• Los sistemas de seguridad como alarmas de incendios y cámaras de vigilancia.
• Toda la luminaria (interior y exterior) del edificio.
• El estado del sistema hidráulico y eléctrico.

Conclusiones

• El mantenimiento residencial es importante para los dueños de una propiedad y también para sus residentes.
• Las tareas de mantenimiento en un conjunto residencial no son muy distintas de las actividades de mantenimiento comercial que deben realizarse en una tienda o restaurante, salvo por el alcance o profundidad.
• Un Software de Mantenimiento es una herramienta muy útil para automatizar actividades básicas de mantenimiento residencial. Así, se ahorra tiempo y energía.