Mantenibilidad: ¿Qué es y Cómo se Calcula?
La mantenibilidad es una condición fundamental para evaluar la compra y gestión de maquinaria en tu organización.
Antes de realizar una inversión en activos, es importante saber cuánto tiempo y recursos se necesitarán para mantenerlos en óptimo estado. La mantenibilidad es un indicador útil para definir estos parámetros.
En este artículo, conocerás qué es y cómo aplicar un indicador de mantenibilidad en tu organización para decidir sobre los equipos que tienes operativos, los que evalúas adquirir y los que estás pensando desechar.
¿Qué es Mantenibilidad?
La mantenibilidad se refiere a la facilidad con que se pueden ejecutar las tareas de gestión de mantenimiento a un equipo o activo.
Se trata de una métrica de rendimiento que podemos calcular para cada máquina. Si conseguimos índices alentadores, significa que, si el equipo falla, podremos repararlo de forma simple y segura.
Además, la mantenibilidad nos ayuda a conocer el nivel de dificultad a la hora de aplicar mantenimiento correctivo en un activo.
Esta dificultad se mide en la cantidad de horas que tardarán los técnicos en reparar un equipo. Claro, esa medida en la práctica dependerá de la logística de mantenimiento de la empresa, la ubicación de la maquinaria y cómo es utilizada.
Imaginemos una empresa petrolífera. No será lo mismo reparar una caldera en la sede central de la compañía que en una plataforma en medio del océano.
El cálculo de mantenibilidad se define en la fase de diseño de una máquina. Es decir, el fabricante es quien debe proveer el dato exacto al comprador.
Importancia de la Mantenibilidad
La mantenibilidad es primordial para definir un plan de mantenimiento viable, ya que nos ayudará a jerarquizar los elementos críticos en nuestra cadena productiva.
De hecho, es una métrica que podemos considerar dentro de nuestro análisis de criticidad y así programar acciones preventivas para los activos con niveles de mantenibilidad crítica (alta).
De esta forma, se pueden asignar recursos con exactitud y enfocándonos en lo más importante.
Lógicamente, se dará espacial atención a los activos con niveles altos de mantenibilidad, ya que, si llegan a fallar, significará mucho más tiempo y recursos invertidos en reparaciones.
Para gestionar el mantenimiento exitosamente, el fabricante calcula el índice de mantenibilidad durante el diseño de un equipo o activo tomando en cuenta:
- El grado de accesibilidad
- El grado de modularidad
- Los tiempos de sustitución de componentes
- Los medios de detección de fallas
- El conocimiento requerido.
Todos estos elementos se incluyen en un Programa de Mantenibilidad.
Diferencias entre Fiabilidad y Mantenibilidad
Conocer la mantenibilidad de un activo nos dice qué recursos necesitaremos en caso de reparación. Además, expresa el tiempo necesario para que el equipo vuelva a estar operativo.
Por el contrario, la fiabilidad es un indicador del tiempo que un activo puede operar sin problemas.
El programa de mantenimiento debe evaluar muy de cerca estos datos. La mantenibilidad y fiabilidad de los equipos, gestionadas correctamente, conducen a niveles de rendimiento más altos, porque permiten extender la vida útil de la maquinaria.
La mantenibilidad debe rondar niveles mínimos, mientras que la fiabilidad debería, en el mejor de los casos, mantenerse en niveles elevados. Para lograr esto, es importante considerar algunos factores:
- Evaluar la capacidad de los técnicos: su grado de comprensión y disciplina determinará si el índice de mantenibilidad puede o no reducirse.
- Llevar registros de mantenimiento: un archivo con los procedimientos y fallas comunes observadas en el pasado permitirá estandarizar las reparaciones y hacerlas repetibles.
- Estandarizar el equipo y el inventario: es importante saber qué piezas tenemos en el almacén y cuáles hacen falta. Esto mejora la intercambiabilidad y supone reparaciones más rápidas.
- Mejorar el mantenimiento preventivo y predictivo: esto prolongará la fiabilidad de los activos.
- Incorporar un Software de Mantenimiento: contar con una herramienta profesional de gestión de mantenimiento reducirá significativamente el índice de mantenibilidad, pues se cubren todos los flancos: desde una comunicación ágil y multiplataforma (app móvil y escritorio), hasta la posibilidad de registrar parámetros de funcionamiento y emitir informes.
Cómo Calcular la Mantenibilidad en Mantenimiento
Como dijimos, el indicador de mantenibilidad lo genera el fabricante durante el diseño del equipo, pero también el usuario puede estimar el suyo.
Esto se logra calculando el tiempo promedio que el departamento de mantenimiento tarda en reparar un equipo, una métrica de rendimiento llamada MTTR (Mean Time to Repair: Tiempo Medio de Reparación).
¿Qué es el MTTR?
El MTTR cuantifica el tiempo promedio que tarda un equipo averiado en diagnosticarse, repararse y recuperarse. Es el esfuerzo y recursos invertidos en restaurar un activo a sus condiciones normales de operación después de experimentar una falla o avería.
Se puede calcular usando la siguiente fórmula:
Tiempo de inactividad total (horas invertidas en repararse) Número total de averías
Un MTTR más bajo significa un mayor índice de mantenibilidad y viceversa. Veamos un ejemplo:
Imaginemos que tenemos una máquina expendedora de café que funciona 10 horas al día, y se averió dos veces el último mes.
Supongamos que la primera falla se debió a una pieza rota que tardó 3 horas en reemplazarse. La segunda avería fue causada por un sobrecalentamiento, y se necesitaron 4 horas para reparar y devolver la máquina a su estado óptimo.
Este mes, el tiempo de inactividad total causado por un total de 2 eventos es de 7 horas. Esto coloca el MTTR en 3.5 horas al aplicar la fórmula.
Cuantificación del MTTR
El MTTR solo se cuantifica considerando el tiempo promedio de cada parón operativo, independientemente del período entre las instancias de tiempo de inactividad.
Existen software profesionales para calcular el MTTR de forma fácil y rápida, como Emaint CMMS. Esta es solo una de las herramientas digitales que puedes usar para:
- Calcular el OEE: «Overall Equipment Effectiveness” o “Eficacia Global de Equipos Productivos», que mide el rendimiento de un activo.
- Planificar el mantenimiento preventivo para los activos con alta demanda de mantenibilidad.
- Gestionar inventarios y órdenes de trabajo.
Conclusiones
La mantenibilidad es un indicador fundamental para todo encargado de mantenimiento, pero no es la única que necesitas considerar.
Entre tantos indicadores e información clave, puedes llegar a confundirte con volúmenes incontrolables de datos. Para estos casos, la solución es contar con una herramienta profesional.
Un Software de Mantenimiento te permitirá disminuir la mantenibilidad y agilizar todas las tareas relacionadas con la mantención de activos empresariales.
Si no conoces estas soluciones, puedes visitar plataformas especializadas como ComparaSoftware para hallar un listado completo de herramientas y elegir la indicada.