Aplica el Small Data y domina la complejidad de la era de los datos
¿Sabías que según el estudio DATA NEVER SLEEPS, para 2025 se prevén 181 zettabytes de datos en Internet? Imagínate, si convirtieras esa cifra en DVDs, tendrías suficientes para viajar 26 veces de la Tierra a la luna y volver. Esta inmensidad puede parecer un laberinto para las pequeñas empresas que quieren entrar a la era del big data. Afortunadamente, hay una alternativa: el small data.
En este artículo, te brindaremos una visión clara de cómo el small data puede modificar radicalmente la forma en que tu empresa se relaciona con la información. Con esta herramienta podrás tomar decisiones fundamentadas en datos cruciales, sin el ruido de la sobrecarga de información.
¿Empezamos?
La nueva era de los datos: Del Big Data al Small Data
La era de los datos es un tiempo donde cada interacción en línea, ya sea en una red social o una búsqueda en internet, tiene un propósito más allá de lo aparente: la generación de valiosa información.
Vivimos en un océano de información. Cada click, cada «me gusta», cada búsqueda, deja una huella. Estas huellas, cuando se agrupan, nos ofrecen perspectivas y patrones sobre comportamientos y tendencias.
Este inmenso volumen de datos, o big data, ayuda a las empresas a entender el panorama general, a prever tendencias del mercado o a identificar oportunidades. Los datos se convierten en la brújula que guía la toma de decisiones estratégicas.
La era de los datos se caracteriza por cómo se descompone, interpreta y utiliza la información recopilada. El Big data y el small data son una parte crucial de esta ecuación, la cual exploraremos a continuación.
¿Qué es el big data?
Para este punto es probable que hayas escuchado el término big data. Pero, ¿qué es exactamente? Big data se refiere a las ingentes cantidades de datos que se generan constantemente desde diversas fuentes, ya sean directamente producidas por humanos o por máquinas.
Estos datos pueden ser estructurados, como bases de datos tradicionales, o no estructurados, como tuits en una red social.
Para darte una idea más clara, piensa en tu comportamiento al ver series o películas en plataformas como Netflix. Cada selección que haces, los minutos que ves y hasta lo que decides no terminar, son datos que se recolectan. Esta plataforma combina tu conjunto de datos con la información de millones de otros usuarios. El resultado: las recomendaciones personalizadas de qué ver a continuación.
Entender el big data es más fácil si consideras las tres V:
- Volumen: Hablamos de petabytes o exabytes de datos. Por la magnitud, necesitas tecnología especializada y científicos de datos para procesarlos.
- Variedad: Engloba distintos tipos de datos, desde textos hasta imágenes o transacciones.
- Velocidad: La recolección y procesamiento de estos datos, dada su magnitud, no es instantánea y requiere tiempo y esfuerzo.
Pero no todo es tan fácil y beneficioso. Trabajar con big data presenta desafíos. No solo es costoso en términos de tecnología y especialistas, sino que también necesitas filtrar y analizar estos datos para obtener insights de calidad.
Pero aquí viene lo interesante: existe un contraste llamado Small Data. Aunque no tan célebre como el big data, te ofrece valiosas perspectivas, a menudo con un coste significativamente menor. ¡Veamos qué tiene para ofrecer!
¿Qué es el Small Data? Definición
Mientras el big data representa vastos océanos de información, el small data se refiere a pequeñas porciones de datos, más específicas y manejables. Al manejar dosis tan pequeñas y directas, no requiere de tecnologías complejas o especialistas para interpretarlo.
Piensa en tu perfil de una red social o en la app de tu banco que detalla tus gastos mensuales. Estos son ejemplos cotidianos de datos utilizando el concepto de small data.
Estos datos pueden ser categorizados mediante las tres V:
- Volumen: Se caracterizan por una menor cantidad, facilitando su manejo.
- Variedad: Generalmente, abarcan un único tipo de datos, simplificando su comprensión.
- Velocidad: El análisis es veloz, permitiendo obtener resultados casi en tiempo real.
¿Cuál es la diferencia entre Big Data y Small Data? ¿Cuál le conviene a mi empresa?
La clave para tu negocio radica en entender que tanto el big data como el small data tienen su lugar, ofreciendo distintas perspectivas y beneficios. Ahora, profundicemos en ello.
Big data se caracteriza por manejar vastas cantidades de datos. Estos datos, usualmente sin estructura, revelan patrones y tendencias generales. Por ejemplo, te dirá cuántas personas visitaron tu web el último año.
Por otro lado, small data se centra en detalles. Este abarca pequeños datos específicos y organizados. Si quisieras conocer cómo cada visitante llegó a tu sitio, este sería tu aliado. Su precisión es su fortaleza.
El análisis del big data suele ser periódico, dada su magnitud. Sin embargo, el small data ofrece resultados inmediatos, muchas veces en tiempo real.
Entonces, mientras el big data te da una visión general, el small data aporta enfoque y detalle. Tu elección dependerá de tus metas empresariales. Ambos tienen el potencial de orientar y mejorar tus decisiones estratégicas.
5 pasos fáciles para aplicar el Small Data en tu empresa
Aplicar el small data en tu empresa puede ser la diferencia entre decisiones genéricas y decisiones específicas que toquen directamente a tu cliente.
Ahora, ¿cómo puedes hacer esto? Aquí tienes algunas estrategias:
- Escucha activamente a tus clientes. Facilita que dejen comentarios y opiniones sobre tus productos o servicios. Cada feedback es una pieza valiosa de small data que puedes usar para mejorar.
- Optimiza tu analítica web. Ajusta tu análisis para focalizarte en esos clientes potenciales que realmente son tu público objetivo.
- Observación directa. Estudia cómo se comportan tus clientes, ya sea en tu página web, tu tienda física, o incluso cuando tienen un problema y presentan una reclamación. Sus acciones te hablarán.
- Dialoga con ellos. Organiza encuentros o encuestas para entender sus opiniones y necesidades. Esto te permitirá descubrir áreas de mejora y adaptar tus ofertas a sus demandas.
- Estudia a la competencia. Investiga sus estrategias, observa cómo presentan sus productos y servicios y descubre qué les hace destacar.
Recuerda, el objetivo es comprender exactamente lo que tu cliente desea y cómo puedes ofrecérselo. Utilizando small data, tienes el poder de personalizar tu oferta, haciendo que cada cliente sienta que está hecho a su medida.
¿Qué herramientas necesitas para utilizar el Small Data?
Para implementar efectivamente el small data en tu negocio, es esencial estar equipado con ciertas tecnologías. A continuación, te presento las herramientas indispensables:
- Bases de datos segmentadas: Estas te permiten clasificar a tus clientes. Facilita la comunicación directa y efectiva, ya sea enviando recordatorios o ejecutando campañas de marketing específicas.
- Sistema CRM: Es la piedra angular para centralizar la información del cliente. Ayuda en la automatización de procesos, garantizando que mantengas un contacto regular y estructurado con tus clientes.
- Herramientas de análisis y visualización: Son vitales para profundizar en los pequeños datos. Te permiten detectar tendencias emergentes y anticipar las necesidades del cliente antes de que estas se manifiesten.
Los beneficios del Small Data
El small data se ha posicionado como una herramienta vital en el ámbito empresarial, ofreciendo una serie de ventajas que no deben pasarse por alto.
Pero, ¿qué ventajas concretas te encontrarás al aplicar esta herramienta?
Es flexible
Esta técnica es versátil. Puede ser adoptada tanto por grandes corporaciones como por pymes. No requiere una inversión astronómica y, gracias a las herramientas actuales, facilita la interpretación de pequeños datos y la corrección de errores en tiempo real.
Te permite conocer a tu cliente
Cada negocio se erige pensando en su cliente ideal. El small data te permite tener una imagen nítida de las preferencias del consumidor, asegurando que tus ofertas estén alineadas con sus expectativas y necesidades.
Eleva las tasas de conversión
Al diseñar campañas de marketing basadas en small data, estás optimizando la personalización. El cliente siente que la propuesta está hecha a medida, lo que incrementa las probabilidades de éxito.
Te ayuda a identificar clientes valiosos
No todos los clientes son iguales. Con el small data, puedes diferenciar entre un cliente potencial y un cliente leal, lo que te permite focalizar tus esfuerzos en aquellos que generan más valor para tu empresa.
Conclusión
El small data ha demostrado ser el puente hacia decisiones empresariales más acertadas y eficientes. Este enfoque se destaca por su habilidad para filtrar la vastedad de la información y centrarse en los detalles cruciales, ofreciendo claridad en medio del caos del big data. A medida que avanzamos, es evidente que el small data será esencial para cualquier organización que aspire a mantenerse ágil y relevante en un mundo impulsado por datos.
Sin embargo, saber es solo la mitad del camino. La implementación efectiva requiere herramientas adecuadas. En nuestra categoría de analítica, encontrarás opciones como Einstein Analytics, QlikView y Tableau Server que pueden guiarte en este proceso.
Recuerda: No se trata de seguir una tendencia a ciegas, sino de empoderar a tu empresa en un entorno de datos en constante evolución.